Había muchas ganas de ver este festival. Fuimos siguiendo la data durante muchos meses, previendo que la jugada iba a ser óptima. Como fuimos parte de la 1º edición, no queríamos perdernos la movida de este año.
Al momento del anuncio de la grilla 2010, en un principio un poco nos desilusionamos pensando “ufff, Cafres, Nonpa, Resistencia… otra vez???” pero sólo fue un impulso egoísta e injusto de un primer momento ya que esa primera línea del reggae, por nuestra ubicación geográfica, no era de difícil acceso, eran las bandas que uno podía ver con una frecuencia mas bien alta (sin ir mas lejos, a Nonpalidece en este ultimo bimestre los vi tres veces, sin contar la cuarta vez que sería en este Carlos Paz & Love) y a su vez vimos que la presencia de artistas extranjeros era poca, casi nula, a diferencia de la primera edición donde aparecían en escena Macka B y Mad Professor entre otros.
Pero al analizar un poco lo que se ofrecía para esta II edición, la jugada resultaba más que interesante: una grilla relativamente federal, que a su vez acercaba a la gente del interior a esa primerísimo línea del reggae argento condensada en dos noches para que todos puedan disfrutarlo. Y este festival era un festival más realista: la ambición del primero no se condice con la actualidad del movimiento reggae argentino…. Joder, que acá aún no estamos preparados para tener nuestro propio Rototom, falta crecer como movimiento, falta que desandemos mucho este camino y este CP&L era una propuesta muchísimo, pero muchísimo mas acertada.
La fecha se venía encima y la “producción de RadioBemba” veía que los problemas financieros eran graves…. sumamente graves…. y con eso se abría la posibilidad de quedar afuera del festival, aunque siempre una carta queda en juego.
Destino Carlos Paz vía LDD
Sin demasiadas esperanzas, nos anotamos al Meet & Greet de La De Dios, esperando que la suerte juegue una vez más a nuestro favor. La ilusión fue corta ya que en el programa los anotados al concurso se contaban de a varias docenas y al momento del sorteo, nuestro nombre no aparecía entre los favorecidos…
Primer llamado… se equivocan en la respuesta… segundo llamado…. lo mismo…
Ya estábamos algo esperanzados, pero no demasiado aún.
Tercer llamado, un tal Ernesto acierta y las chances bajan un 50%.
El resto: una serie de llamados (cerca de 6 o 7 más!) y todos contestando mal o sin atender el fono hasta que el azar nos guiña un ojo, suena el celular y bien… salida al aire, preguntas, tensión, festejo… Allí mismo, se empieza a escribir la verdadera historia de nuestro Carlos Paz & Love 2010, ganando la 2º plaza del Meet & Greet LDD!!
No More Waiting!!!
Llega el viernes 22, nos vamos a la terminal de Retiro (eludiendo obviamente algún que otro perro policía) y a las 23:30 hs. estábamos en el Chevallier con destino Córdoba.
El viaje no fue demasiado interesante, ya que la secuencia fue: terminal de Retiro – cinco o seis cuadras de camino recorrido – reclinar el asiento – cerrar los ojos - despertarme en Córdoba.
Ocho y media de la mañana estábamos en la terminal de la capital cordobesa a la espera de Tebi (productor del evento) que nos daría los pasajes hasta la villa y las acreditaciones al “camping in love”, el campamento oficial del festival en donde haríamos rancho hasta el regreso.
Y en Córdoba mismo nos encontramos con Ernesto, el otro ganador del meet & greet, que había viajado en un micro diferente al nuestro por problemas de sobreventa de pasajes.
Camping In Love
En el camping del A.C.A. se destinó una parcela bien grande para que la gente que concurriría al festival haga rancho, y la jugada fue un golazo. Ya de temprano el viernes había un nutrido grupo de acampantes copando el lugar con sus respectivas pulseras identificatorias, en un clima festivo, cordial, de guetto, compartiendo cervezas, comida, mates y otras yerbas.
Junto a Ernesto decidimos armar una sola carpa y hacer la jugada juntos, abaratando algunos costos de comida/bebida y haciendo más interesante la estadía en la villa, ya que una movida así en solitario a veces puede ser un tanto agobiante sobre todo si uno es un tanto tímido o corto para encarar gente.
Una siesta corta en la carpa que para las dos de la tarde funcionaba como una especie de sauna, una refrescante ducha, un par de cervezas tibias ya que las heladeras de la proveeduría no daban a basto y a las 5 de la tarde estábamos firmes en la puerta del evento
Día I
Ni bien arribamos, gracias a un policía que estaba completamente perdido en cuanto a que pulsera entraba y que no (los colores de las pulseras identificaban que eras: violetas, negras, blancas, anaranjadas…) entramos por la puerta de acceso de los músicos sin realizar ningún tipo de cola, ni cacheo, ni esperar que se abran las puertas al público.
La fiesta estaba a punto de comenzar y nosotros ya formábamos parte de la misma cuando aún eran muy pocos los que estaban dentro del predio.
Recorrimos el lugar como hacemos cada vez que llegamos a un evento para trazarnos un pequeño mapa en la cabeza y medianamente esbozar puestos estratégicos que jamás coparemos para sacar buenas fotos y escuchar mejor.
Esta vez el predio era sensiblemente mas chico que el año pasado. Ya no se contaba con el playón donde estaba montado el escenario principal en el 2009, sino que dicho escenario estaba montado unos cuantos metros más hacia adentro del predio, mucho más cercano al escenario soundsystem del inmenso gimnasio cubierto. Y ese escenario soundsystem también había cambiado su orientación, emplazándose en el medio del gimnasio.
Entre medio de ambos escenarios estaba montada una carpa donde funcionaba LDD Soundsystem y donde también hacia su jugada la gente del Reggae Redondos. Por último, frente a esta carpa, estaba uno de los lugares destinados a saquear nuestros bolsillos: la barra.
No podemos olvidar nombrar a la Rastaferia que se armo en el ingreso al escenario Soundsystem, un amplio espacio con varios stands de venta de remeras, discos y artesanías de todo tipo que daban el color ideal al lugar, siendo este sector musicalizado por los amigos de Dubtronik.
Puntapié inicial
Alguien tendría que abrir el fuego en esta II edición, y los encargados de dicho trámite fueron la gente de Nil Obstat, banda oriunda de los pagos de Isidro Casanova (Bs. As.) demostrando que no solo el agite esta en el oeste sino que también ahí vive el buen reggae. Lamentablemente y como ocurre en toda apertura, la gente aún escaseaba en el predio, contándose en unos cientos nada más. Un set de 20 minutos como tuvieron todos los participantes del Carlos Paz In Contest, el concurso dentro del festival que le aseguraba a las bandas ganadoras la participación en la III edición del festival su presencia con todos los gastos pagos formando parte de la grilla principal, esto elegido mediante el voto de la gente que asistía al festival y por un jurado compuesto por gente de prensa, de la producción del evento y por gente que sabe mucho pero mucho de reggae.
Terminando el show de Nil Obstat, que nos conmovió sobre todo en una sentida versión de la hiperconocida canción-homenaje al Che Guevara “hasta siempre, comandante” de Carlos Puebla en versión reggae, decidimos buscar un poco de aire, unas cervezas y encontrarnos un poco con amigos.
El futuro ya llego….
Guardando un poco de energías para la larga jornada, sólo escuchamos de lejos una parte del set de la Kingston Jam, uno de los créditos que jugaban de locales en Córdoba (los muchachos son de Rio IV) que venían sonando muy poderosos.
Con una lata de cerveza helada en la mano, nos instalamos en la carpa de LDD Soundsystem que hacían la jugada en combinación con la gente de Reggae Redondos. Y con ellos era con quienes queríamos hablar
Reggaes Redondos es un disco tributo en tiempo de reggae a la, quizá, banda mas grande y gloriosa de la historia de nuestro rock nacional: Patricio rey y sus Redonditos de Ricota. Un disco que se lanzaba en dicho evento y que cuenta con la participación de grandes artistas de la escena reggae como Guille Bonetto, el Bahiano, Pablo Molina, entre otros. Así es que mientras la Kingston sonaba, dialogamos sobre el proceso de “parir” este disco con Sergio Manzi y Neron, dos de las tres patas productoras de este proyecto que es sumamente recomendable para todos: si sos amante de los redondos, tenes una buena forma de homenaje, sumamente respetuosa, a esta banda; si te gusta el reggae, de ninguna manera vas a sentirte defraudado al escuchar el disco ya que todo el material es de altísima calidad (yo recomiendo, entre otros, la versión de “superlógico” de Pablo Molina) con arreglos que en algunos pasajes te van a dejar boquiabierto.
Un disco que se hizo en forma independiente, que costo literalmente un huevo sacarlo a las bateas, pero que afortunadamente ya esta entre nosotros esta perla casi casi, de colección. El futuro ya llego… y es con reggae redondos musicalizándolo.
Abrazo de por medio, felicitaciones varias y un ejemplar del disco bajo el brazo, era tiempo ya de ir a vernos otra banda.
No confundir estafa con robo..
Ya cerca del escenario, sube una banda que también participa del Carlos Paz in Contest.
Oriundos de la provincia de Neuquén, vestidos con impecable camisa negra y una suerte de falsa corbata blanca, La Estafa Dub copaba el stage.
Reconozco que conocía poco material de ellos y me animaba escucharlos en vivo. Sabíamos, eso si, del excelente managereo que contaba la banda por anécdotas y comentarios, y además por lo que veníamos viendo en el lugar podemos dar fe de que es así. Un buen manager a veces hace la diferencia, ya que hay tipos que se encargan de contratos, fechas y demás yeites del asunto pero, también están los otros, los visionarios, los que juegan desde atrás, los que van un paso delante de todos, y realmente eso parece ser que se da en esta banda. La prueba cabal de esto se dio en el momento que la banda, terminado el show, venia rápidamente descargando cosas del escenario. Músicos y manager manos a la obra, y un grupo de gente desde el vallado agita al cantante quien responde con un tímido saludo. Rápido de reflejos, el manager le dice “solta todo y anda a saludar a la gente, te están saludando loco, es tu gente!”. Entiende de la esencia de esto, y con eso está todo dicho.
En lo musical, realizaron un set que fue realmente increíble. Un vuelo artístico al nivel de las grandes bandas, sonando literalmente demoledoramente ajustados. Una particular mención al batero y al bajista de la banda que conforman una dupla de hierro, marcando el paso al resto, pero sin jugar de estrellas. Acá hay equipo, no figuras de chispazos descollantes. Y eso es lo que garpa.
El cierre???? La versión mas jugada del tema de Metallica: “seek & destroy” que hasta al más metalero de todos los podría haber dejado alucinando.
Por eso, dada la clase de magistral música a la que asistíamos, pedimos que no se confundan: estos muchachos no estafaron a nadie en el Carlos Paz, simplemente se robaron el escenario del evento con el mejor reggae que te imagines. Y fue la primera sorpresa (grata) que me regalo esta segunda edición del festival.
Del este lado del charco
Sigue la grilla corriendo, ya que este año el escenario principal funciona como un reloj suizo que en menos de diez minutos habilita a la siguiente banda a subir a escena. Una mención particular hay que hacerle a todos los trabajadores de la parte técnica: sonidistas, iluminadores y demás que la transpiraron todo el tiempo y encima con altísimo rendimiento.
Aún no caía el sol y el calor se hacía sentir. Nada mas refrescante que un poco de dub hipnótico, con toques trance, bien “tripeados”, y eso justamente es lo que Vaimaca Dub hace de su arte. Los amigos que se vinieron desde Uruguay para participar en el In Contest tuvieron una más que aceptable performance, que fue apreciada sobre todo por esos paladares mas lisérgicos que estaban presentes en este Sábado.
Así se cerraba la primera parte de la jornada del festival, es decir, las primeras cuatro bandas que participaban en esta fecha por el lugar en la grilla para la versión 2011 del evento. Se invita a la gente a realizar su voto (el voto que consideramos más importante, el del “pueblo reggaero”) mientras tanto se prepara todo para que siga tronándonos la cabeza la música disparada desde el escenario principal del predio
Tres al hilo
Es el turno de Shelby, que traen su propuesta desde Rosario. Banda muy jóven pero que a pesar de esto suenan como si tuvieran muchos años de escenario. Sólidos, con un sonido poderoso, realizan un set sin altibajos. El cantante, sin ser un frontman de esos que agitan y agitan logra dirigir la movida bien clavado en el centro del escenario.
Hoy en día, la escena under del reggae esta llena de bandas que la vienen remando, y en el caso de Shelby vemos que el trabajo que realizan tiene un potencial espectacular para seguir avanzando, con pibes que tienen una enorme humildad y un profundo respeto por lo que hacen. Hay proyección y hay laburo en la banda, que no es poco.
Luego, es el turno de Jahmila. Desconocidos para mi absolutamente, lograron llamarme la atención en dos o tres canciones. Reggae con mixturas que hacían muy dulces a las canciones, con un mensaje clarísimo, positivo, conciente, siendo éste el fuerte de la banda que es una mezcla de nacionalidades (gringos, argentinos…) pero que se encargan de hacernos saber a todos que entre hermanos no existen fronteras. Y a su vez son los primeros en denunciar algunos problemas que se estaban dando en la puerta del predio desde arriba del escenario, cosa que la mayoría desconocíamos al momento (problemas con el acceso a menores al show a pesar de poseer entradas. Detallaremos más adelante)
Un fuerte aplauso que vale doble para Jahmila, que se lo gano poniéndole bien el pecho a la situación ya que casi la totalidad del publico que estaba escuchando su show no los conocía.
Ahora era el momento de una de las bandas que específicamente quería escuchar en vivo. Una banda que tiene ganado hace ya largo rato su lugar en la escena local y que, a pesar de escuchar asiduamente sus discos, de apreciar muchísimo su material, jamás había visto en vivo y en directo. Me refiero a Holy Piby.
Increíble el sonido de este grupo, que juegan en primera sin lugar a dudas. Sonando por momentos como una mixtura entre Soldiers of Jah Army y Groundation, sonando por momentos muy funk, muy souleros, con un hermoso groove, con una voz particularísima que cierra a la perfección con el sonido de la banda.
Delicioso show de Holy Piby, que estalla (y te hace estallar) con su versión de “I shot the Sheriff” ya con la noche a cuestas. Y esa versión, en ese marco, la voy a llevar de recuerdo por muchísimo tiempo en mis oídos…
Servite una Coca!
El espíritu festivalero es así. Uno no se queda jamás atornillado frente al escenario, sino que suele salir de gira por todo el lugar, a veces como buscando algo o a alguien que no sabemos qué ni quien es. Pero no importa, porque todos estamos así, deambulando, encontrándonos con amigos desconocidos, hablando con gente que nunca vimos y que probablemente jamás volveremos a ver, sacándonos fotos, compartiendo una cerveza o un faso con rondas que se arman automáticamente y con maratónicas charlas que fluyen y fluyen. Porque en gran medida es así el yeite festivalero, con la música como marco, como excusa, propiciando el encuentro de las personas en absoluta armonía.
Así fue que terminamos tomando un refresco (mas que necesario a esas alturas) y fumando un poco mas alejados del escenario principal (sin perderlo jamás de vista) con un grupo de gente que como adelantaba más arriba se armo de la nada mientras sonaba La Coca Fernandez, otro de los que la jugaban de locales y que de entrada hicieron valer dicha localía.
Muy power, muy arriba el set, con la gente cantando y bailando con muchísima energía que iba y venia desde el escenario. Mezcla de ritmos, mas mestizo que lo que había pasado antes, la Coca tiró un sonido que entre otros condimentos (además del reggae) había ska, reminiscencias rockers, un poco de ska-punk y fiesta… por sobre todas las cosas, fiesta. Fieles al estilo cordobés, esta Coca más que a Fernandez, olía a Fernet. Y bien por eso!
Que no se corte!
Ya se venían los platos fuertes, pero aún faltaba mucho para que la noche termine.
Haciéndole la previa a Nonpalidece, sube el amigo BlazingOne a realizar un auténtico soundsystem al escenario principal adelantando así lo que se venía para mas entrada la noche en el escenario techado.
El soundsystem, un recurso en extremo económico, simple, no deja de ser efectivo en lo más mínimo. Es más, me arriesgo a decir que suele ser una de las apuestas mas jugadas ya que es estar ahí arriba solo, con una pista de fondo, tirando la lírica. Es enfrentar a la jauría con total hidalguía. Acá no tenes una banda que te pueda tapar algún bache, zapar un poco, rellenarte con algún firulete… acá estas sólo, de frente al público, con una pista grabada.
Como decía, BlazingOne sube a cantar un par de riddims, a hacer el aguante mientras se preparaba todo y deja entrever parte del material que nos regalaría mas tarde en su set.
Como en ambas jornadas, se arma todo rápidamente y sube Nonpalidece al escenario.
Es indiscutible que Nonpa esta pasando por un excelente momento, hasta podríamos arriesgar que están en su mejor momento arriba del escenario. Se los ve disfrutar y te dejan vibrando tema tras tema que son coreados por todo el público.
Siendo una de las bandas que repetían en el festival (si recuerdan, Nonpalidece fue uno de los números principales el año pasado en este mismo evento) es notorio también el avance del grupo comparándolo con la performance de tan sólo un año atrás. Más humildes, con mayor diálogo con la gente, con mejor energía bajando del escenario, con Néstor en llamas bailando frenético manteniendo el pulso siempre bien arriba haciendo que el show sea inolvidable, sobre todo para aquellas personas que no tienen la posibilidad de verlos tan seguido.
Todo viajaba sobre rieles, hasta que de golpe se produce un corte en el escenario que impediría la continuidad del show por largo rato.
La gente, marcando la diferencia, no atinó a putear o a silbar como todos creerían que sucedería. Con un “y dale, y dale dale Nonpa, uhooooo” hicieron el aguante por unos cuantos minutos hasta que se solucionó el tema del generador (causal del problema) que terminó estrolado. Así, sube Nonpalidece en pleno nuevamente al escenario, agradece a la gente y puede cerrar su set como corresponde.
Con la fuerza del mar, y de las sierras cordobesas
Ya se venía el cierre con Resistencia Suburbana. Pero para amenizar la espera, suben las chicas de Actitud Maria Marta también, como BlazingOne, a realizar un poco de soundsystem adelantando lo que se venia más tarde. Sin ningún pudor de decirlo, estas chicas en un par de minutos que estuvieron en escena lograron focalizar mi interés de manera absoluta, sin respiro, deseando que llegue el momento rápido de verlas actuar a pleno. Por favor, que cojones!!! Y eso, amigos, fue solo el comienzo… porque bajaron raudamente para darle lugar a la gente de Resistencia en el escenario, dejándole un publico bien caliente.
Resistencia también era un número puesto. Otro de los que son primera línea indiscutida de la escena local. Te pueden gustar o no, te puede agradar más o menos, pero también hay que reconocer que el amor y el aguante que tiene la gente para con Resistencia es absolutamente legítimo y bien ganado.
Resistencia es, por excelencia, la banda de reggae argentina. Obvio que hay muchas bandas que suenan más jamaiquinas, que suenan más ajustadas al paladar de la isla. Pero ahí radica la diferencia y el valor agregado de la gente comandada por Luis Alfa. Resistencia es bien argentina, bien de acá. Suenan y huelen a cancha, a obrero, a pibe que escucha reggae pero se crió en un barrio donde los parlantes de cualquier casa se retobaban a pura cumbia, Resistencia es choripan, asado y vino tinto de tetra, es porro paraguayo prensado, es la argentinidad hecha reggae. Y los shows de ellos suenan así, furiosos, crudos, ásperos, con el mensaje claro sin demasiado firulete ni adorno. Lo tomas o lo dejas. Pero eso amigo, ya no es problema de ellos. Eso es lo que tienen para dar y es exactamente lo que nos brindaron en el Crlos Paz, cerrando así el escenario outdoor del día Sábado.
Soundsystem full range!
Una nueva cerveza, minutos antes del cierre de Resistencia, y nos encaminamos al predio techado que pasaría a ser el escenario mayor de ahí en mas en este día. Se venían los Soundsystems a pleno, con sonidos mas dancehalleros, mas bailables y actuales, con toques de new roots y hasta con algo de hip-hop.
LDD Soundsystem copa la parada y comienza la movida con el set de BlazingOne. Calidad vocal de exquisito paladar, con aromas new roots pero con cierto estilo vintage en algunos fraseos, Sebastián BlazingOne se planta en escena y sin dudarlo, te hace bailar. Alto soundsystem sonando in da houseeeee!!!
Luego, también llega la esperada “Combination” que suele aparecer en todo soundsystem. BlazingOne hace su jugada junto a Ras ImaNuel, cerrando juntos un muy buen momento de reggae.
Ahora es el turno de los Mama Perfecta. Violero y voz de esta banda Sanjuanina que estaban anunciados para el domingo con banda completa, suben a calentar motores en formato soundsystem también en esta primera noche. Dancehall y ragga bien caliente, los Mama Perfecta se adueñan del escenario con el volumen bien tuneado.
No es solo una cuestión de actitud
Ahora el escenario se llenaría de mujeres. Como dije antes, las Actitud Maria Marta adelantaron una pequeña parte en el escenario principal de lo que sería el set que estaban a punto de encarar, y ya me habían dejado boquiabierto. Así que de primera, gane la punta del escenario con cámara en mano y una oreja pegada a la torre de parlantes dispuesto a dejarme llevar por lo que estas chicas regalaran desde arriba de las tablas.
A las Actitud las conocía y escuchaba desde que era un borrego, cuando ellas recién empezaban y Alicia (aka Alika) era parte de la formación y cantaban “el cielo, pacha, caix, la embajada, cinema, new Cork city la concha de tu hermana”. Estoy hablando de más, mucho más de una década atrás, y me encantaban. Sobre todo Malena D´Alessio que siempre me pareció la más lúcida, con la que compartía en cierta medida filosofía, discurso, compromiso. Más de una vez sin conocernos estuvimos en reuniones de H.I.J.O.S o marchas de Madres, o participando de algún festival. Pasaron muchas coequipers por Actitud hasta que actualmente tienen una formación que realmente descolla.
Mi reencuentro con las chicas, por así decirlo, fue en el show de los “100 Nicetos de Dancing Mood” y desde ese momento volvieron a ocupar un lugar privilegiado en mis discos de uso habitual, y volví a preocuparme en rastrear data de ellas, fechas o de seguirle los pasos de en que andaban.
Pues bien, en este marco, es que me planto en el festival a escucharlas. DJ Black tirándole las pistas y selekteandole desde la tarima, y cuatro voces super amalgamadas pero que cada una por si sola tiene características muy distintas y de absoluta personalidad. Malena que es quien va llevando la rienda en todo momento, la de la lírica mas politizada, la que “lee” al público, la que pone el pecho y puede hacer batidas kilométricas sin respirar y sin darte respiro. Karen Pastrana, incendiaria, la esencia hiphopera hecha mujer, la lengua filosa, la que escupe misiles, la que lleva en la garganta un poderío inabarcable. Gaby de Lorenzo es la pata soulera, la que pone la melodía con una voz sublime, la que sonríe y brilla en el escenario, es la que hace que tanta furia, tanta adrenalina, te llegue como una caricia directo al corazón. Y por último Ivonne, nueva incorporación a Actitud Maria Marta, ex Bandana, es dueña de una voz exquisita y en el escenario se encargo de cerrarle el culo a más de un prejuicioso que podía andar dando vueltas.
Desde que subieron a escena, desde ese mismo momento, uno si es sincero debe reconocer que pasa por todos los estados posible: desde la furia hasta el baile desenfrenado, desde la toma de conciencia de miles de problemas de los que hay que hacerse cargo hasta las ganas de enamorarse, desde las ganas de gritar hasta romperte la garganta hasta el susurro melodioso que te impacta de pleno en el pecho.
Unas mujeres que más de un machito envidiaría los cojones que tienen. Mejor dicho, los ovarios. Enormes, como enormes se hacen ellas en vivo. Hasta pueden llegar a ser intimidantes si no estas bien parado, porque amigos, de tanto sentimiento, les juro, te dejan con la piel erizada y temblando como un bebe.
Actitud les sobra. Y nada más que por esos minutos que estuvieron en escena, los cientos de kilómetros que realizamos para ir a Carlos Paz, valieron más que la pena.
Así, cerramos el primer día del festival, volviendo tronados hacia la carpa que nos esperaba a unas cuadras del predio, arrastrándonos casi por la calle.
El sol ya estaba asomando nuevamente, pero el corazón latiendo más fuerte que nunca no tengan la más mínima duda, estaba más luminoso que nunca.
Al momento del anuncio de la grilla 2010, en un principio un poco nos desilusionamos pensando “ufff, Cafres, Nonpa, Resistencia… otra vez???” pero sólo fue un impulso egoísta e injusto de un primer momento ya que esa primera línea del reggae, por nuestra ubicación geográfica, no era de difícil acceso, eran las bandas que uno podía ver con una frecuencia mas bien alta (sin ir mas lejos, a Nonpalidece en este ultimo bimestre los vi tres veces, sin contar la cuarta vez que sería en este Carlos Paz & Love) y a su vez vimos que la presencia de artistas extranjeros era poca, casi nula, a diferencia de la primera edición donde aparecían en escena Macka B y Mad Professor entre otros.
Pero al analizar un poco lo que se ofrecía para esta II edición, la jugada resultaba más que interesante: una grilla relativamente federal, que a su vez acercaba a la gente del interior a esa primerísimo línea del reggae argento condensada en dos noches para que todos puedan disfrutarlo. Y este festival era un festival más realista: la ambición del primero no se condice con la actualidad del movimiento reggae argentino…. Joder, que acá aún no estamos preparados para tener nuestro propio Rototom, falta crecer como movimiento, falta que desandemos mucho este camino y este CP&L era una propuesta muchísimo, pero muchísimo mas acertada.
La fecha se venía encima y la “producción de RadioBemba” veía que los problemas financieros eran graves…. sumamente graves…. y con eso se abría la posibilidad de quedar afuera del festival, aunque siempre una carta queda en juego.
Destino Carlos Paz vía LDD
Sin demasiadas esperanzas, nos anotamos al Meet & Greet de La De Dios, esperando que la suerte juegue una vez más a nuestro favor. La ilusión fue corta ya que en el programa los anotados al concurso se contaban de a varias docenas y al momento del sorteo, nuestro nombre no aparecía entre los favorecidos…
Primer llamado… se equivocan en la respuesta… segundo llamado…. lo mismo…
Ya estábamos algo esperanzados, pero no demasiado aún.
Tercer llamado, un tal Ernesto acierta y las chances bajan un 50%.
El resto: una serie de llamados (cerca de 6 o 7 más!) y todos contestando mal o sin atender el fono hasta que el azar nos guiña un ojo, suena el celular y bien… salida al aire, preguntas, tensión, festejo… Allí mismo, se empieza a escribir la verdadera historia de nuestro Carlos Paz & Love 2010, ganando la 2º plaza del Meet & Greet LDD!!
No More Waiting!!!
Llega el viernes 22, nos vamos a la terminal de Retiro (eludiendo obviamente algún que otro perro policía) y a las 23:30 hs. estábamos en el Chevallier con destino Córdoba.
El viaje no fue demasiado interesante, ya que la secuencia fue: terminal de Retiro – cinco o seis cuadras de camino recorrido – reclinar el asiento – cerrar los ojos - despertarme en Córdoba.
Ocho y media de la mañana estábamos en la terminal de la capital cordobesa a la espera de Tebi (productor del evento) que nos daría los pasajes hasta la villa y las acreditaciones al “camping in love”, el campamento oficial del festival en donde haríamos rancho hasta el regreso.
Y en Córdoba mismo nos encontramos con Ernesto, el otro ganador del meet & greet, que había viajado en un micro diferente al nuestro por problemas de sobreventa de pasajes.
Camping In Love
En el camping del A.C.A. se destinó una parcela bien grande para que la gente que concurriría al festival haga rancho, y la jugada fue un golazo. Ya de temprano el viernes había un nutrido grupo de acampantes copando el lugar con sus respectivas pulseras identificatorias, en un clima festivo, cordial, de guetto, compartiendo cervezas, comida, mates y otras yerbas.
Junto a Ernesto decidimos armar una sola carpa y hacer la jugada juntos, abaratando algunos costos de comida/bebida y haciendo más interesante la estadía en la villa, ya que una movida así en solitario a veces puede ser un tanto agobiante sobre todo si uno es un tanto tímido o corto para encarar gente.
Una siesta corta en la carpa que para las dos de la tarde funcionaba como una especie de sauna, una refrescante ducha, un par de cervezas tibias ya que las heladeras de la proveeduría no daban a basto y a las 5 de la tarde estábamos firmes en la puerta del evento
Día I
Ni bien arribamos, gracias a un policía que estaba completamente perdido en cuanto a que pulsera entraba y que no (los colores de las pulseras identificaban que eras: violetas, negras, blancas, anaranjadas…) entramos por la puerta de acceso de los músicos sin realizar ningún tipo de cola, ni cacheo, ni esperar que se abran las puertas al público.
La fiesta estaba a punto de comenzar y nosotros ya formábamos parte de la misma cuando aún eran muy pocos los que estaban dentro del predio.
Recorrimos el lugar como hacemos cada vez que llegamos a un evento para trazarnos un pequeño mapa en la cabeza y medianamente esbozar puestos estratégicos que jamás coparemos para sacar buenas fotos y escuchar mejor.
Esta vez el predio era sensiblemente mas chico que el año pasado. Ya no se contaba con el playón donde estaba montado el escenario principal en el 2009, sino que dicho escenario estaba montado unos cuantos metros más hacia adentro del predio, mucho más cercano al escenario soundsystem del inmenso gimnasio cubierto. Y ese escenario soundsystem también había cambiado su orientación, emplazándose en el medio del gimnasio.
Entre medio de ambos escenarios estaba montada una carpa donde funcionaba LDD Soundsystem y donde también hacia su jugada la gente del Reggae Redondos. Por último, frente a esta carpa, estaba uno de los lugares destinados a saquear nuestros bolsillos: la barra.
No podemos olvidar nombrar a la Rastaferia que se armo en el ingreso al escenario Soundsystem, un amplio espacio con varios stands de venta de remeras, discos y artesanías de todo tipo que daban el color ideal al lugar, siendo este sector musicalizado por los amigos de Dubtronik.
Puntapié inicial
Alguien tendría que abrir el fuego en esta II edición, y los encargados de dicho trámite fueron la gente de Nil Obstat, banda oriunda de los pagos de Isidro Casanova (Bs. As.) demostrando que no solo el agite esta en el oeste sino que también ahí vive el buen reggae. Lamentablemente y como ocurre en toda apertura, la gente aún escaseaba en el predio, contándose en unos cientos nada más. Un set de 20 minutos como tuvieron todos los participantes del Carlos Paz In Contest, el concurso dentro del festival que le aseguraba a las bandas ganadoras la participación en la III edición del festival su presencia con todos los gastos pagos formando parte de la grilla principal, esto elegido mediante el voto de la gente que asistía al festival y por un jurado compuesto por gente de prensa, de la producción del evento y por gente que sabe mucho pero mucho de reggae.
Terminando el show de Nil Obstat, que nos conmovió sobre todo en una sentida versión de la hiperconocida canción-homenaje al Che Guevara “hasta siempre, comandante” de Carlos Puebla en versión reggae, decidimos buscar un poco de aire, unas cervezas y encontrarnos un poco con amigos.
El futuro ya llego….
Guardando un poco de energías para la larga jornada, sólo escuchamos de lejos una parte del set de la Kingston Jam, uno de los créditos que jugaban de locales en Córdoba (los muchachos son de Rio IV) que venían sonando muy poderosos.
Con una lata de cerveza helada en la mano, nos instalamos en la carpa de LDD Soundsystem que hacían la jugada en combinación con la gente de Reggae Redondos. Y con ellos era con quienes queríamos hablar
Reggaes Redondos es un disco tributo en tiempo de reggae a la, quizá, banda mas grande y gloriosa de la historia de nuestro rock nacional: Patricio rey y sus Redonditos de Ricota. Un disco que se lanzaba en dicho evento y que cuenta con la participación de grandes artistas de la escena reggae como Guille Bonetto, el Bahiano, Pablo Molina, entre otros. Así es que mientras la Kingston sonaba, dialogamos sobre el proceso de “parir” este disco con Sergio Manzi y Neron, dos de las tres patas productoras de este proyecto que es sumamente recomendable para todos: si sos amante de los redondos, tenes una buena forma de homenaje, sumamente respetuosa, a esta banda; si te gusta el reggae, de ninguna manera vas a sentirte defraudado al escuchar el disco ya que todo el material es de altísima calidad (yo recomiendo, entre otros, la versión de “superlógico” de Pablo Molina) con arreglos que en algunos pasajes te van a dejar boquiabierto.
Un disco que se hizo en forma independiente, que costo literalmente un huevo sacarlo a las bateas, pero que afortunadamente ya esta entre nosotros esta perla casi casi, de colección. El futuro ya llego… y es con reggae redondos musicalizándolo.
Abrazo de por medio, felicitaciones varias y un ejemplar del disco bajo el brazo, era tiempo ya de ir a vernos otra banda.
No confundir estafa con robo..
Ya cerca del escenario, sube una banda que también participa del Carlos Paz in Contest.
Oriundos de la provincia de Neuquén, vestidos con impecable camisa negra y una suerte de falsa corbata blanca, La Estafa Dub copaba el stage.
Reconozco que conocía poco material de ellos y me animaba escucharlos en vivo. Sabíamos, eso si, del excelente managereo que contaba la banda por anécdotas y comentarios, y además por lo que veníamos viendo en el lugar podemos dar fe de que es así. Un buen manager a veces hace la diferencia, ya que hay tipos que se encargan de contratos, fechas y demás yeites del asunto pero, también están los otros, los visionarios, los que juegan desde atrás, los que van un paso delante de todos, y realmente eso parece ser que se da en esta banda. La prueba cabal de esto se dio en el momento que la banda, terminado el show, venia rápidamente descargando cosas del escenario. Músicos y manager manos a la obra, y un grupo de gente desde el vallado agita al cantante quien responde con un tímido saludo. Rápido de reflejos, el manager le dice “solta todo y anda a saludar a la gente, te están saludando loco, es tu gente!”. Entiende de la esencia de esto, y con eso está todo dicho.
En lo musical, realizaron un set que fue realmente increíble. Un vuelo artístico al nivel de las grandes bandas, sonando literalmente demoledoramente ajustados. Una particular mención al batero y al bajista de la banda que conforman una dupla de hierro, marcando el paso al resto, pero sin jugar de estrellas. Acá hay equipo, no figuras de chispazos descollantes. Y eso es lo que garpa.
El cierre???? La versión mas jugada del tema de Metallica: “seek & destroy” que hasta al más metalero de todos los podría haber dejado alucinando.
Por eso, dada la clase de magistral música a la que asistíamos, pedimos que no se confundan: estos muchachos no estafaron a nadie en el Carlos Paz, simplemente se robaron el escenario del evento con el mejor reggae que te imagines. Y fue la primera sorpresa (grata) que me regalo esta segunda edición del festival.
Del este lado del charco
Sigue la grilla corriendo, ya que este año el escenario principal funciona como un reloj suizo que en menos de diez minutos habilita a la siguiente banda a subir a escena. Una mención particular hay que hacerle a todos los trabajadores de la parte técnica: sonidistas, iluminadores y demás que la transpiraron todo el tiempo y encima con altísimo rendimiento.
Aún no caía el sol y el calor se hacía sentir. Nada mas refrescante que un poco de dub hipnótico, con toques trance, bien “tripeados”, y eso justamente es lo que Vaimaca Dub hace de su arte. Los amigos que se vinieron desde Uruguay para participar en el In Contest tuvieron una más que aceptable performance, que fue apreciada sobre todo por esos paladares mas lisérgicos que estaban presentes en este Sábado.
Así se cerraba la primera parte de la jornada del festival, es decir, las primeras cuatro bandas que participaban en esta fecha por el lugar en la grilla para la versión 2011 del evento. Se invita a la gente a realizar su voto (el voto que consideramos más importante, el del “pueblo reggaero”) mientras tanto se prepara todo para que siga tronándonos la cabeza la música disparada desde el escenario principal del predio
Tres al hilo
Es el turno de Shelby, que traen su propuesta desde Rosario. Banda muy jóven pero que a pesar de esto suenan como si tuvieran muchos años de escenario. Sólidos, con un sonido poderoso, realizan un set sin altibajos. El cantante, sin ser un frontman de esos que agitan y agitan logra dirigir la movida bien clavado en el centro del escenario.
Hoy en día, la escena under del reggae esta llena de bandas que la vienen remando, y en el caso de Shelby vemos que el trabajo que realizan tiene un potencial espectacular para seguir avanzando, con pibes que tienen una enorme humildad y un profundo respeto por lo que hacen. Hay proyección y hay laburo en la banda, que no es poco.
Luego, es el turno de Jahmila. Desconocidos para mi absolutamente, lograron llamarme la atención en dos o tres canciones. Reggae con mixturas que hacían muy dulces a las canciones, con un mensaje clarísimo, positivo, conciente, siendo éste el fuerte de la banda que es una mezcla de nacionalidades (gringos, argentinos…) pero que se encargan de hacernos saber a todos que entre hermanos no existen fronteras. Y a su vez son los primeros en denunciar algunos problemas que se estaban dando en la puerta del predio desde arriba del escenario, cosa que la mayoría desconocíamos al momento (problemas con el acceso a menores al show a pesar de poseer entradas. Detallaremos más adelante)
Un fuerte aplauso que vale doble para Jahmila, que se lo gano poniéndole bien el pecho a la situación ya que casi la totalidad del publico que estaba escuchando su show no los conocía.
Ahora era el momento de una de las bandas que específicamente quería escuchar en vivo. Una banda que tiene ganado hace ya largo rato su lugar en la escena local y que, a pesar de escuchar asiduamente sus discos, de apreciar muchísimo su material, jamás había visto en vivo y en directo. Me refiero a Holy Piby.
Increíble el sonido de este grupo, que juegan en primera sin lugar a dudas. Sonando por momentos como una mixtura entre Soldiers of Jah Army y Groundation, sonando por momentos muy funk, muy souleros, con un hermoso groove, con una voz particularísima que cierra a la perfección con el sonido de la banda.
Delicioso show de Holy Piby, que estalla (y te hace estallar) con su versión de “I shot the Sheriff” ya con la noche a cuestas. Y esa versión, en ese marco, la voy a llevar de recuerdo por muchísimo tiempo en mis oídos…
Servite una Coca!
El espíritu festivalero es así. Uno no se queda jamás atornillado frente al escenario, sino que suele salir de gira por todo el lugar, a veces como buscando algo o a alguien que no sabemos qué ni quien es. Pero no importa, porque todos estamos así, deambulando, encontrándonos con amigos desconocidos, hablando con gente que nunca vimos y que probablemente jamás volveremos a ver, sacándonos fotos, compartiendo una cerveza o un faso con rondas que se arman automáticamente y con maratónicas charlas que fluyen y fluyen. Porque en gran medida es así el yeite festivalero, con la música como marco, como excusa, propiciando el encuentro de las personas en absoluta armonía.
Así fue que terminamos tomando un refresco (mas que necesario a esas alturas) y fumando un poco mas alejados del escenario principal (sin perderlo jamás de vista) con un grupo de gente que como adelantaba más arriba se armo de la nada mientras sonaba La Coca Fernandez, otro de los que la jugaban de locales y que de entrada hicieron valer dicha localía.
Muy power, muy arriba el set, con la gente cantando y bailando con muchísima energía que iba y venia desde el escenario. Mezcla de ritmos, mas mestizo que lo que había pasado antes, la Coca tiró un sonido que entre otros condimentos (además del reggae) había ska, reminiscencias rockers, un poco de ska-punk y fiesta… por sobre todas las cosas, fiesta. Fieles al estilo cordobés, esta Coca más que a Fernandez, olía a Fernet. Y bien por eso!
Que no se corte!
Ya se venían los platos fuertes, pero aún faltaba mucho para que la noche termine.
Haciéndole la previa a Nonpalidece, sube el amigo BlazingOne a realizar un auténtico soundsystem al escenario principal adelantando así lo que se venía para mas entrada la noche en el escenario techado.
El soundsystem, un recurso en extremo económico, simple, no deja de ser efectivo en lo más mínimo. Es más, me arriesgo a decir que suele ser una de las apuestas mas jugadas ya que es estar ahí arriba solo, con una pista de fondo, tirando la lírica. Es enfrentar a la jauría con total hidalguía. Acá no tenes una banda que te pueda tapar algún bache, zapar un poco, rellenarte con algún firulete… acá estas sólo, de frente al público, con una pista grabada.
Como decía, BlazingOne sube a cantar un par de riddims, a hacer el aguante mientras se preparaba todo y deja entrever parte del material que nos regalaría mas tarde en su set.
Como en ambas jornadas, se arma todo rápidamente y sube Nonpalidece al escenario.
Es indiscutible que Nonpa esta pasando por un excelente momento, hasta podríamos arriesgar que están en su mejor momento arriba del escenario. Se los ve disfrutar y te dejan vibrando tema tras tema que son coreados por todo el público.
Siendo una de las bandas que repetían en el festival (si recuerdan, Nonpalidece fue uno de los números principales el año pasado en este mismo evento) es notorio también el avance del grupo comparándolo con la performance de tan sólo un año atrás. Más humildes, con mayor diálogo con la gente, con mejor energía bajando del escenario, con Néstor en llamas bailando frenético manteniendo el pulso siempre bien arriba haciendo que el show sea inolvidable, sobre todo para aquellas personas que no tienen la posibilidad de verlos tan seguido.
Todo viajaba sobre rieles, hasta que de golpe se produce un corte en el escenario que impediría la continuidad del show por largo rato.
La gente, marcando la diferencia, no atinó a putear o a silbar como todos creerían que sucedería. Con un “y dale, y dale dale Nonpa, uhooooo” hicieron el aguante por unos cuantos minutos hasta que se solucionó el tema del generador (causal del problema) que terminó estrolado. Así, sube Nonpalidece en pleno nuevamente al escenario, agradece a la gente y puede cerrar su set como corresponde.
Con la fuerza del mar, y de las sierras cordobesas
Ya se venía el cierre con Resistencia Suburbana. Pero para amenizar la espera, suben las chicas de Actitud Maria Marta también, como BlazingOne, a realizar un poco de soundsystem adelantando lo que se venia más tarde. Sin ningún pudor de decirlo, estas chicas en un par de minutos que estuvieron en escena lograron focalizar mi interés de manera absoluta, sin respiro, deseando que llegue el momento rápido de verlas actuar a pleno. Por favor, que cojones!!! Y eso, amigos, fue solo el comienzo… porque bajaron raudamente para darle lugar a la gente de Resistencia en el escenario, dejándole un publico bien caliente.
Resistencia también era un número puesto. Otro de los que son primera línea indiscutida de la escena local. Te pueden gustar o no, te puede agradar más o menos, pero también hay que reconocer que el amor y el aguante que tiene la gente para con Resistencia es absolutamente legítimo y bien ganado.
Resistencia es, por excelencia, la banda de reggae argentina. Obvio que hay muchas bandas que suenan más jamaiquinas, que suenan más ajustadas al paladar de la isla. Pero ahí radica la diferencia y el valor agregado de la gente comandada por Luis Alfa. Resistencia es bien argentina, bien de acá. Suenan y huelen a cancha, a obrero, a pibe que escucha reggae pero se crió en un barrio donde los parlantes de cualquier casa se retobaban a pura cumbia, Resistencia es choripan, asado y vino tinto de tetra, es porro paraguayo prensado, es la argentinidad hecha reggae. Y los shows de ellos suenan así, furiosos, crudos, ásperos, con el mensaje claro sin demasiado firulete ni adorno. Lo tomas o lo dejas. Pero eso amigo, ya no es problema de ellos. Eso es lo que tienen para dar y es exactamente lo que nos brindaron en el Crlos Paz, cerrando así el escenario outdoor del día Sábado.
Soundsystem full range!
Una nueva cerveza, minutos antes del cierre de Resistencia, y nos encaminamos al predio techado que pasaría a ser el escenario mayor de ahí en mas en este día. Se venían los Soundsystems a pleno, con sonidos mas dancehalleros, mas bailables y actuales, con toques de new roots y hasta con algo de hip-hop.
LDD Soundsystem copa la parada y comienza la movida con el set de BlazingOne. Calidad vocal de exquisito paladar, con aromas new roots pero con cierto estilo vintage en algunos fraseos, Sebastián BlazingOne se planta en escena y sin dudarlo, te hace bailar. Alto soundsystem sonando in da houseeeee!!!
Luego, también llega la esperada “Combination” que suele aparecer en todo soundsystem. BlazingOne hace su jugada junto a Ras ImaNuel, cerrando juntos un muy buen momento de reggae.
Ahora es el turno de los Mama Perfecta. Violero y voz de esta banda Sanjuanina que estaban anunciados para el domingo con banda completa, suben a calentar motores en formato soundsystem también en esta primera noche. Dancehall y ragga bien caliente, los Mama Perfecta se adueñan del escenario con el volumen bien tuneado.
No es solo una cuestión de actitud
Ahora el escenario se llenaría de mujeres. Como dije antes, las Actitud Maria Marta adelantaron una pequeña parte en el escenario principal de lo que sería el set que estaban a punto de encarar, y ya me habían dejado boquiabierto. Así que de primera, gane la punta del escenario con cámara en mano y una oreja pegada a la torre de parlantes dispuesto a dejarme llevar por lo que estas chicas regalaran desde arriba de las tablas.
A las Actitud las conocía y escuchaba desde que era un borrego, cuando ellas recién empezaban y Alicia (aka Alika) era parte de la formación y cantaban “el cielo, pacha, caix, la embajada, cinema, new Cork city la concha de tu hermana”. Estoy hablando de más, mucho más de una década atrás, y me encantaban. Sobre todo Malena D´Alessio que siempre me pareció la más lúcida, con la que compartía en cierta medida filosofía, discurso, compromiso. Más de una vez sin conocernos estuvimos en reuniones de H.I.J.O.S o marchas de Madres, o participando de algún festival. Pasaron muchas coequipers por Actitud hasta que actualmente tienen una formación que realmente descolla.
Mi reencuentro con las chicas, por así decirlo, fue en el show de los “100 Nicetos de Dancing Mood” y desde ese momento volvieron a ocupar un lugar privilegiado en mis discos de uso habitual, y volví a preocuparme en rastrear data de ellas, fechas o de seguirle los pasos de en que andaban.
Pues bien, en este marco, es que me planto en el festival a escucharlas. DJ Black tirándole las pistas y selekteandole desde la tarima, y cuatro voces super amalgamadas pero que cada una por si sola tiene características muy distintas y de absoluta personalidad. Malena que es quien va llevando la rienda en todo momento, la de la lírica mas politizada, la que “lee” al público, la que pone el pecho y puede hacer batidas kilométricas sin respirar y sin darte respiro. Karen Pastrana, incendiaria, la esencia hiphopera hecha mujer, la lengua filosa, la que escupe misiles, la que lleva en la garganta un poderío inabarcable. Gaby de Lorenzo es la pata soulera, la que pone la melodía con una voz sublime, la que sonríe y brilla en el escenario, es la que hace que tanta furia, tanta adrenalina, te llegue como una caricia directo al corazón. Y por último Ivonne, nueva incorporación a Actitud Maria Marta, ex Bandana, es dueña de una voz exquisita y en el escenario se encargo de cerrarle el culo a más de un prejuicioso que podía andar dando vueltas.
Desde que subieron a escena, desde ese mismo momento, uno si es sincero debe reconocer que pasa por todos los estados posible: desde la furia hasta el baile desenfrenado, desde la toma de conciencia de miles de problemas de los que hay que hacerse cargo hasta las ganas de enamorarse, desde las ganas de gritar hasta romperte la garganta hasta el susurro melodioso que te impacta de pleno en el pecho.
Unas mujeres que más de un machito envidiaría los cojones que tienen. Mejor dicho, los ovarios. Enormes, como enormes se hacen ellas en vivo. Hasta pueden llegar a ser intimidantes si no estas bien parado, porque amigos, de tanto sentimiento, les juro, te dejan con la piel erizada y temblando como un bebe.
Actitud les sobra. Y nada más que por esos minutos que estuvieron en escena, los cientos de kilómetros que realizamos para ir a Carlos Paz, valieron más que la pena.
Así, cerramos el primer día del festival, volviendo tronados hacia la carpa que nos esperaba a unas cuadras del predio, arrastrándonos casi por la calle.
El sol ya estaba asomando nuevamente, pero el corazón latiendo más fuerte que nunca no tengan la más mínima duda, estaba más luminoso que nunca.
1 comentario:
EXITOSSSSSSSSSSSS!!!!!!!!!!!!!!! PARA ESTA NOCHE Y SIEMPRE......!! Perly....
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